El Dr. Josué Barahona-Garrido revisaba en EL PROBIOTICO las bases teóricas que justificaban el uso de probióticos para combatir la pandemia de Covid-19, que se extendía ya por todo el mundo y cuya primera ola estaba siendo devastadora. Los probióticos podrían brindar beneficios a la hora de controlar la gravedad del cuadro clínico. Como cabía esperar, los dos años de pandemia han supuesto un gran salto de calidad en nuestros conocimientos sobre el sistema inmunitario y su respuesta a las infecciones virales. Más concretamente, la investigación reciente ha abierto un escenario nuevo: el eje intestino-pulmón, descrito en profundidad por el Dr. Jaime Forero en un magnífico Tema de Revisión publicado en nuestra web. La interacción entre microbiota intestinal y sistema inmunitario de las mucosas tiene un impacto decisivo en la inmunidad sistémica.
Una clara demostración de la funcionalidad del eje intestino-pulmón es la evidencia de que un probiótico administrado por vía oral ha sido eficaz para tratar la infección respiratoria por SARS-CoV2. Un ensayo controlado con placebo, aleatorizado y ciego, incluyó 300 pacientes ambulatorios infectados por SARS-Cov2 en la primera ola de la pandemia, que recibieron un probiótico constituido por cuatro cepas bacterianas (AB21)1 o placebo2. La remisión completa a los 30 días se logró en 78 pacientes de 147 (53,1%) en el grupo Probiótico, en comparación con 41 de 146 (28,1%) en el grupo placebo, de modo que el probiótico prácticamente dobló la tasa de remisiones (RR: 1,89; IC95%: 1,40–2,55; P <0,001). La mediana de días hasta la remisión clínica fue 5 días más corta en el grupo probiótico que en el placebo. Además, el probiótico redujo la carga viral nasofaríngea y los infiltrados pulmonares en comparación con el placebo, y aumentó significativamente las IgM e IgG específicas frente a SARS-Cov2.
Los autores del estudio han identificado algunos aspectos mecanísticos que pueden explicar la eficacia de este probiótico3. En comparación con el placebo, la administración oral de la combinación de 4 cepas AB21 resultó en un aumento significativo de interferones (IFN) tipo I en el suero, especialmente IFN-beta, que se correlaciona con una mayor cantidad de anticuerpos IgM e IgG específicos frente a SARS-CoV2. Este hallazgo es especialmente interesante a la luz de lo descrito por el Dr. Jaime Forero en su Tema de Revisión. En la Covid-19 hay disminución y pérdida de funcionalidad de las células dendríticas plasmacitoides, que son las principales productoras de IFN tipo I para combatir la infección viral y para activar otras células inmunocompetentes, incluyendo las células productoras de anticuerpos. La fórmula AB21 parece revertir estos efectos negativos del virus sobre las células dendríticas plasmacitoides porque incrementa los niveles de IFN tipo I y el incremento se correlaciona con el título de inmunoglobulinas específicas (IgM/IgG).
En conclusión, el probiótico AB21 promete ser un aliado muy útil en el tratamiento de las enfermedades respiratorias de origen viral.
Bibliografía
- ab21probiotic.com/es
- Gutiérrez-Castrellón P, Gandara-Martí T, Abreu Y, Abreu AT, Nieto-Rufino CD, López-Orduña E, Jiménez-Escobar I, et al. Probiotic improves symptomatic and viral clearance in Covid19 outpatients: a randomized, quadruple-blinded, placebo-controlled trial. Gut Microbes. 2022; 14(1): 2018899.
- Gutierrez‐Castrellon P, Gandara‐Marti T, Espadaler‐Mazo J. Probiotic Effect on SARS‐CoV2 Immunity Is Associated to Type‐1 Interferons: A Post‐Hoc Analysis of a Randomized, Placebo‐Controlled Trial. FASEB J. 2022; 36(S1).
Es muy interesante pues los probioticos ayudan a poblar las bacterias buenas
Gracias
Es muy interesante
Muchas gracias por los comentarios.
Hay una revisión Cochrane reciente que sumariza los ensayos clínicos con probióticos para prevenir infecciones respiratorias:
Cochrane Database of Systematic Reviews 2022, Issue 8. Art. No.: CD006895.
DOI: 10.1002/14651858.CD006895.pub4.