La Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos (SEMiPyP), la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica (SEPB) y la Sociedad Española de Neurología (SEN), han realizado conjuntamente un Documento de Consenso sobre la microbiota y el uso de probióticos/prebióticos en patologías neurológicas y psiquiátricas.
En los últimos años, se han relacionado muchas enfermedades neurológicas y del campo de la salud mental con una alteración del eje microbiota-intestino-cerebro, de comunicación bidireccional, en el que la microbiota intestinal se va a comunicar con los sistemas homeostáticos (el nervioso, el endocrino y el inmunitario) en el intestino y, desde esa localización, a través de diferentes vías, con el cerebro, influyendo en su funcionamiento, tema que ya hemos abordado en otras ocasiones en este blog (https://www.elprobiotico.com/microbiota-intestino-cerebro/).
Por lo tanto, la microbiota intestinal, además de ayudar a mantener las funciones cerebrales, también podría influir en el desarrollo de trastornos neurológicos y psiquiátricos, ya que las alteraciones en el eje se asocian con múltiples enfermedades, que tienen como base estados de estrés oxidativo e inflamatorio, que afectan a todos los componentes de esa red de comunicaciones que constituyen dicho eje. (figura 1).
Figura 1. Eje microbiota-intestino-cerebro
Así, la disbiosis podría jugar un papel importante en la etiopatogenia de algunas enfermedades neurológicas autoinmunes (esclerosis múltiple), neurodegenerativas (enfermedad de Parkinson, enfermedad de Alzheimer), o en los trastornos del comportamiento (autismo, TDAH, trastornos obsesivo-compulsivos, esquizofrenia, trastorno bipolar), incluyendo patologías relacionadas con el estrés (ansiedad, depresión).
Esta alteración de la microbiota se puede modular con la dieta, el empleo de probióticos y prebióticos y el uso de trasplante fecal. Ya se ha comentado en este blog que, en 2013, los profesores de la Universidad de Cork (Irlanda) T.G. Dinan, C. Stanton y J.F. Cryan propusieron el concepto de “psicobiótico”, un probiótico capaz de producir y liberar sustancias neuroactivas que actuarían a través del eje microbiota-intestino-cerebro y cuya diana terapéutica serían los pacientes con patología neurológica o con trastornos del comportamiento. El grado de evidencia científica de su empleo en muchas de estas patologías todavía es muy limitado, siendo la mayoría de los estudios experimentales, aunque, por la tipología de los pacientes, se han creado muchas expectativas (https://www.elprobiotico.com/probioticos-para-la-depresion/).
Con la finalidad de poder encontrar algunas respuestas a muchas patologías neuropsiquiátricas de difícil manejo, y con el objetivo de mejorar la calidad de vida de estos pacientes y, siempre, bajo el mayor rigor científico, tres sociedades científicas: la Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos (SEMiPyP), la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica (SEPB) y la Sociedad Española de Neurología (SEN), han realizado conjuntamente un Documento de Consenso con la esperanza de que la relación entre científicos y clínicos genere más investigaciones relevantes en este campo. (figura 2)
Figura 2. Portada del Documento de consenso
El manuscrito, en el que han participado 35 expertos, investigadores y médicos, pertenecientes a más de una veintena de centros de investigación y hospitales, consta de tres partes: una introductoria sobre los aspectos básicos de la microbiota y los probióticos (elaborada por miembros de la SEMiPyP), y otras dos, más clínicas, sobre el papel de la microbiota en la enfermedades neurológicas y mentales, realizadas por expertos de la SEN y la SEPB, respectivamente. La difusión del documento por parte de las tres sociedades científicas seguramente tendrá un gran alcance y contribuirá a mejorar los conocimientos sobre el tema entre los profesionales, principalmente neurólogos y psiquiatras.
Como bien finaliza el Documento de Consenso, “La toma de decisiones en la práctica clínica para el empleo de probióticos y/o prebióticos debe basarse en una combinación de evidencia científica y conocimiento práctico, por lo que se recomienda el uso de guías de práctica clínica elaboradas conjuntamente por distintos profesionales de la salud. Esto contribuirá a optimizar una atención sanitaria individualizada, integral, de calidad, efectiva y segura.”
En resumen, creo que este Documento de Consenso, además de un gran logro, representa el “mutualismo” que debe existir entre los investigadores y los clínicos que, indudablemente tendrá un gran beneficio en los pacientes, familiares y cuidadores. Esto permitirá aportar los conocimientos necesarios para nuevas aplicaciones en el tratamiento y prevención de estas enfermedades, reflejo de que estamos ante una de las revoluciones científicas más importantes de la medicina del presente y del futuro.
Bibliografía
Documento de Consenso sobre la microbiota y el uso de probióticos/prebióticos en patologías neurológicas y psiquiátricas [Acceso el 22 de febero de 2021]. Disponible en: https://semipyp.es/wp-content/uploads/2020/12/Documento_consenso.pdf